A viaxe de Gagarin
Miguel Mendiguren vela a su madre en la habitación de un hospital. Hace tiempo que ella ha comenzado a perder la memoria y Miguel se duele por no haber conocido mejor a sus padres. Por ello, decide componer los recuerdos de su infancia y juventud en un cuaderno y, así, compartirlos con su hijo. Rememora entonces una época, la de los años sesenta, marcada por la Guerra Fría y la carrera espacial, pero también por la represión franquista y la lucha clandestina, en la que sus padres, librera e impresor, colaboraron secretamente con el Partido Comunista. Libros, películas, hazañas espaciales y el primer amor hacen de esta novela un ejercicio extraordinario de memoria personal y universal.